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Sardinas y dietas disociadas

sardina

La buena vida tiene un precio, y en mi caso se traduce en un aumento de la grasa abdominal palpable. Las vacaciones de este año han puesto la guinda con la cocina alemana, los pinchos de Santander y la boda de un amigo. Y ya es momento de controlar el asunto. Asi que nos hemos puesto severos y hemos desempolvado nuestros affaires del gimasio.

Hace mas de tres años nos encontrabamos en la misma situacion. A punto de mudarnos a nuestro nuevo apartamento, nos dio por ir a visitar a una dietista. La señora nos tuvo 3 o 4 horitas de reloj explicandonos como se asimilan las cosas, los alimentos que hay, los hidratos lentos y rapidos, los tipos de grasas, las combinaciones de alimentos, etc. En resumen, que la señora nos puso a seguir una dieta disociada (ojo, dieta, no regimen), en la cual teniamos que eliminar cualquier hidrato rapido y nunca combinar los lentos con proteinas. Habia mucha logica en lo que decia, y aunque lo de las combinaciones no lo entendimos muy bien, pues nos pusimos a ello. Todo ello haciendo dos o tres veces por semana algo de gimnasio. En mes y medio habia adelgazado 10 kilos, y la chavala 6 kilos. Todo un exito. Ropa nueva, cambiando XL por L, usando agujeros nuevos del cinturon,…

Y desde entonces la cosa ha ido recuperandose. La verdad que me mantuve bastante tiempo con 7 a 5 kilos menos, con lo cual la ganancia neta aun era palpable. Pero de un año para aqui estamos en las cifras iniciales. Y todo ha sido por la falta de deporte y los excesos culinarios. Excesos menores que antes, porque seguimos respetando ciertas costumbres culinarias de la dieta, pero excesos a fin de cuentas.

Asi que desde que volvimos de vacaciones estamos en plan espartano. Gimnasio 3 o 4 veces por semana y dieta disociada estricta. Yo en dos semanas ya me he quitado esos 3 kilos que se van facil, pero aun no he visto que entre en esa bajada de montaña rusa en la que entramos la otra vez. Pero bueno, tengamos paciencia.

Lo bueno de esta dieta es que la nevera recupera vida y esplendor. Esta llena de pimientos, berenjenas, calabacines, raices de apio, lechuga, tomates, cebollas, zanahorias, ajo, maches, rucula, esparragos verdes, puerros,… y en cuestion proteinica, pues uno intenta cuidarse un poco y se aprovisiona de pollo, carne de ternera y de pescado.

Pescado que teniamos olvidado hace mucho. Pescado que echamos de menos. Las pescaderias aqui son una birria comparadas con las de Santander (normal por otro lado). Al menos ayer encontre unas sardinas con muy buena pinta, agallas rojas y precio reducido. Y las compre. El tema es que recapitulando me di cuenta de que nunca habia hecho sardinas. Si señores, he hecho lubinas, doradas, merluzas, pescadillas, bocartes,… pero nunca sardinas. Asi que me limite a improvisar y a recordar viejas frases que siempre oimos: las escamas se limpian de la cola a la cabeza con un cuchillo, si las haces asadas deja las tripas, que queden jugosas, te van a dar sed, pero no bebas mientras las comes,…

Las sardinas, deliciosas, muy ricas. Parecia que estaba en Los Peñucas (estas planchas TEFAL dan mucho juego), pero un punto negativo tenia que haber. Seguro que hay otra frase que lo recuerda. Todo huele a sardinas despues, y el olor no se va. La ropa, el pelo, la cocina, la plancha, los muebles… todo huele a sardinas. Y aun olia esta mañana. Pero bueno, consideremoslo un pequeño tributo a uno de los pescados mas ricos (y grasosos) que hay.

Y si, mi dieta me permite tomar sardinas. La acompañamos de una enorme ensalada :-)