Navigation

Panacotta con fresas confitadas a la sartén y galleta de hojaldre

Tengo el blog abandonado ultimamente porque no sé que contar, así­ que he decidido retomar un poco los post de cocina y música para devolver un poco la actividad. No me apetece hablar de tecnologí­a ni de polí­tica, así­ que creo que estos dos temas al menos serán interesantes.

Ayer tuvimos el último curso de cocina de la temporada. De primero unas patatas hervidas con una salsa de vinagreta con soja y otra de fenouille estupendas y luego lomo de cerdo marinado al sake, gengibre y cí­tricos con zanahorias glacés. Todo muy bueno. Pero lo que más me sorprendió, tanto por sencillez como por lo bueno que estaba, fue el postre.

La Panacotta es algo muy sencillo de hacer. Nata, azúcar y gelatina. Todo hervido y luego en recipientes a la nevera para que se solidifique. La confitura de fresa que usamos en este postre se hace con las fresas cortadas por la mitad, echándolas en la sartén a tope. Se dejan un rato, y cuando empiezan a «soltar» juguillo y a «turruscarse» ligeramente, se añade azúcar (unos 25 gr por sartén) y se deja caramelizar todo ligeramente. Luego se echa un chorrito mí­nimo de vino tinto para que el azucar no se solidifique y se deja enfriar todo. La galleta se hace con circulos de hojaldre estirados y metidos al horno un ratillo con azúcar glass.

Una vez dura la Panacotta y enfriadas las fresas, se ponen por encima, luego una(s) galleta(s) y para adornar, un poco de menta. Y bien bueno que está.